Cuando amamos lo que tenemos, lo que hacemos y además lo realizamos convencidos y alegremente, seguramente atraeremos aquello que deseamos. Estar quejándonos no solo baja nuestra frecuencia vibratoria, sino que empezamos a perder lo mucho o poco que tenemos; además bloqueamos lo que podemos obtener en un futuro.
Agradecer, valorar y regocijarnos por lo que hemos logrado aplicando nuestras virtudes y talentos hace que disfrutemos no solo el presente, sino que estamos dando los pasos para producir, lo que estamos deseando en el presente.
Agradecer, valorar y regocijarnos por lo que hemos logrado aplicando nuestras virtudes y talentos hace que disfrutemos no solo el presente, sino que estamos dando los pasos para producir, lo que estamos deseando en el presente.
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